El Peeling es un tratamiento dermatológico con el que se consigue una renovación de las células de la cara (o de la zona que se esté tratando) a base de exfoliar las células viejas o dañadas. Los beneficios del Peeling son, entre otros, la prevención del envejecimiento cutáneo, la activación de la circulación y la eliminación de células muertas, lo que ayuda a la oxigenación de la piel.
Normalmente, para realizar este tipo de tratamiento, podemos acudir a una clínica o hacernos con una de las decenas de cremas que existen para tal fin. Hoy, os enseñamos como hacerlo en casa y utilizando productos naturales, lo que sin duda constituirá un ahorro considerable.
Mezclando gel de baño y un poco de sal fina, podemos crear un compuesto que solamente tendremos que aplicar sobre la piel mientras masajeamos circularmente la zona sin llegar a crear demasiada fricción. Otra opción es usar aceite de oliva y azúcar junto con un poco de jugo de limón. Dicho esto, solo queda probarlo y hacer números para calcular la cantidad de dinero en cremas que nos puede ahorrar dicha receta.