No sé si se habrán dado cuenta, pero últimamente me encuentro con muchas noticias positivas acerca de la economía española en medios de comunicación. Y no es que me parezca mal eso de intentar hacer que nos pongamos más positivos, y que pensemos de otra manera, pero creo que la labor de los periodistas no es esa, si no la de mostrar la realidad; y lo cierto es que la realidad de las familias españolas, al menos desde el punto de vista de la crisis económica no está como para echar cohetes.
Precisamente por eso, y sin intención de hacer mella en el espíritu positivo que algunos pretenden infundir, me gustaría que sentásemos los pies en la tierra, al fin y al cabo, por mucho que nos intenten maquillar o demostrar una realidad positiva, nadie nos puede tapar los ojos ante lo que tenemos delante y parece complicado que aquello de tapar el sol con un dedo vaya a funcionar ahora tras muchos siglos sin hacerlo.
Uno de esos artículos a los que me refiero ha sido el Los 10 falsos mitos de la crisis española, el cuál pueden consultar en el siguiente enlace. Y aunque puede que en algunos valores usados para medir nuestra credibilidad y nuestros conceptos macroeconómicos no estemos tan mal, la realidad doméstica es que cada vez ganamos menos y hay menos empleo, y eso solo es síntoma de que nuestra situación no solo no mejora, si no que empeora.
Vía:Invertia
Imagen: Alviseni en Flickr